Blog
¿Cuándo se cae el cordón umbilical del recién nacido?
28/02/2021
La caída del cordón umbilical
La mayoría de los avances en el desarrollo de los bebés tienen una fecha estimada, es decir, un rango de días, semanas o meses en los que puede suceder algo, sin que sea necesariamente una fecha fija o establecida para todos.
En el caso del cordón umbilical pasa algo similar, ya que suele caerse entre la segunda y la tercera semana tras el naciemiento y posterior a esta caída, tarda entre tres y cinco días más en cicatrizar correctamente.
No es igual en todos los bebés, aunque habitualmente el cordón de los nacidos por cesárea se puede caer más tarde. En algunos niños puede hacerlo al quinto día mientras que en otros puede ser 20 días tras el naciemiento. Ambas situaciones serían absolutamente normales.
En algunos casos, el cordón umbilical puede llegar a desprenderse hasta la cuarta semana de vida o cerca del primer mes del bebé. Si vemos que se aproxima esa fecha y no se ha desprendido, podemos consultar al pediatra para que valore la situación y verifique si no hay alguna anomalía en el ombligo del bebé.
Independientemente de la fecha en que suceda la caída del cordón umbilical, jamás se debe estirar para acabar de desprenderlo, ni aunque el hilo a que haya quedado reducido sea muy fino, pues se podría ocasionar un sangrado en el ombligo.
¿Qué sucede al desprenderse el cordón umbilical?
Es posible que al momento en que finalmente se desprenda el ombligo de forma natural, sangre un poco, pero en ese caso la hemorragia se detiene por sí sola inmediatamente.
La cicatrización de la herida que queda en su sitio, suele producirse entre tres y cinco días después de la caída, y mientras esto sucede hay que seguir realizando las curas para lograr que seque perfectamente.
Durante este proceso, es normal que observemos pequeños restos de sangre seca y coagulada en los pliegues internos, y hay que seguir realizando las curas porque el riesgo de infección persiste hasta que el ombligo haya cicatrizado totalmente.
El proceso de cuidado y limpieza después de la caída del cordón umbilical es importante en todos los bebés, pero especialmente en los llamados "ombligos amnióticos", en los que la piel no sobresale sino que quedan hundidos, porque eso hace que estén menos ventilados y sea además más difícil valorar su estado.
Recordemos que en cuanto a la caída del cordón umbilical, más que preocuparnos o apresurarnos porque se caiga, debemos poner atención a los posibles signos de alarma y realizar su cura, limpieza y secado de forma correcta.